Sin una victoria en la Bundesliga desde mediados de diciembre, el Stuttgart, penúltimo en la clasificación, se encuentra ante la posibilidad de repetir su breve permanencia de dos años en la primera división, entre 2017 y 2019, a menos que pueda lograr un cambio de rumbo pronto. Las expectativas aumentaron recientemente por el regreso del talentoso Saša Kalajdžić, pero el hecho es que este equipo no ha marcado un solo gol en cinco jornadas de liga (E1, P4), una hazaña que ni ocurrió en las últimas dos campañas en las que perdió la categoría — en 2015/16 y 2018/19.
El entrenador Pellegrino Matarazzo está bajo mucha presión, pero confía en que la reciente pretemporada en Marbella haya revitalizado a sus jugadores y haya dado tiempo a su equipo médico para reducir una larga lista de lesiones. El hecho de jugar en casa también podría ser un estímulo, ya que ha logrado tres de sus cuatro victorias en esta campaña en condición de local — en cada uno de esos choques también logró anotar antes del descanso.
El Eintracht Frankfurt, que se ubica en la parte media de la tabla, no ha podido agarrar consistencia en esta temporada y tras una racha de tres victorias a finales de 2021, lleva tres partidos sin ganar en 2022 (E1, P2). Es difícil saber qué esperar de este equipo, pero todavía tiene buenas posibilidads de meterse en la zona de clasificación a competiciones europeas. De hecho, es el quinto mejor equipo de la liga como visitante en esta temporada.
Ir al sur a jugar contra el Stuttgart podría ser justamente lo que necesita el Frankfurt para volver al camino del triunfo, ya que llega a este partido con un récord de cinco partidos sin perder en enfrentamientos entre sí (G2, E3), y ganó aquí por tres goles de diferencia en cada una de las dos últimas temporadas en las que el Stuttgart descendió.
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— Eintracht Frankfurt (@eintracht_esp) February 4, 2022
