Corea del Norte incorpora el ruso en las escuelas desde cuarto grado

Corea del Norte incorpora el ruso en las escuelas desde cuarto grado

Corea del Norte incorpora el ruso en las escuelas desde cuarto grado

Corea del Norte anunció que incorporará el idioma ruso como asignatura obligatoria a partir del cuarto grado. La medida, presentada por los medios estatales, marca un nuevo gesto político hacia Moscú en un momento en el que ambos países profundizan su cooperación militar, económica y cultural.

Un cambio educativo con mensaje político

Hasta ahora, el sistema educativo norcoreano daba prioridad al coreano y al inglés como lenguas extranjeras. El ingreso del ruso al plan de estudios no solo suma una nueva competencia académica, sino que envía una señal clara sobre la dirección estratégica que adopta Pyongyang.

El gobierno afirma que enseñar ruso desde una edad más temprana permitirá a los estudiantes “ampliar su visión del mundo” y fortalecer los lazos con un aliado tradicional.

Refuerzo de una alianza en ascenso

La decisión coincide con un acercamiento acelerado entre Kim Jong-un y el Kremlin. En los últimos meses, ambos gobiernos han intensificado los intercambios oficiales, firmado acuerdos tecnológicos y ampliado su cooperación en defensa. Incluir el ruso en las aulas funciona como una herramienta blanda para cimentar esa alianza a largo plazo.

Este movimiento también sigue una tendencia histórica: durante la era soviética, el ruso ocupó un lugar destacado en la educación norcoreana, aunque perdió presencia con el colapso de la URSS.

Impacto en los estudiantes y en el sistema escolar

La inclusión del ruso implicará ajustes en los planes de formación docente, materiales educativos y capacitación lingüística. Desde el Ministerio de Educación aseguran que ya se desarrollan nuevos libros y programas adaptados a estudiantes de primaria.

El gobierno busca que los alumnos alcancen competencia básica antes de finalizar la secundaria, lo que facilitaría intercambios académicos y la creación de nuevas becas con universidades rusas.

Rusia amplía su influencia cultural

Para Moscú, el cambio representa una oportunidad de extender su influencia cultural y política en Asia Oriental. El Kremlin ha fortalecido iniciativas de diplomacia educativa en países aliados y ve en la medida norcoreana un respaldo simbólico y estratégico.

A su vez, expertos afirman que el movimiento tiene implicaciones geopolíticas en un contexto global marcado por tensiones con Occidente.

Un futuro educativo condicionado por la política

Aunque la incorporación del ruso se presenta como un avance académico, el trasfondo político es innegable. Corea del Norte utiliza su sistema educativo como herramienta de alineación ideológica, y este cambio refuerza su narrativa de cercanía con Rusia como contrapeso a Estados Unidos, Corea del Sur y Japón.

Con esta decisión, Pyongyang reconfigura su modelo educativo y envía un mensaje contundente al mundo: su relación con Moscú no solo es militar o diplomática, también formará parte de la formación de sus nuevas generaciones.