La vez que Pepe Mujica defendió con vehemencia a Luis Suárez ante la FIFA

Tras la polémica mordida en Brasil 2014, el expresidente uruguayo respaldó con fuerza al delantero y criticó a la FIFA sin filtros
Bogotá, 13 de mayo de 2025 — En junio de 2014, el mundo del fútbol vivía uno de sus escándalos más mediáticos: Luis Suárez, figura de la selección uruguaya, fue sancionado con nueve partidos de suspensión y cuatro meses de inhabilitación por morder al defensor italiano Giorgio Chiellini en pleno Mundial de Brasil. La reacción de la FIFA fue severa, pero también lo fue la defensa que hizo por entonces el presidente de Uruguay, José «Pepe» Mujica.
“Una manga de viejos hijos de puta”: Mujica sin filtros contra la FIFA
Con su estilo directo y sin rodeos, Mujica se convirtió en el inesperado defensor del delantero nacido en Salto. A su regreso a Uruguay, tras la eliminación de la Celeste en octavos de final frente a Colombia, el mandatario recibió al equipo en el aeropuerto y lanzó una frase que dio la vuelta al mundo:
“En la FIFA son una manga de viejos hijos de puta”, declaró a la prensa.
El emotivo gesto con Suárez en plena madrugada
Más allá del lenguaje, Mujica tuvo un gesto humano que quedó grabado en la memoria colectiva del país: esperó a Suárez en el Aeropuerto de Carrasco la noche del 26 de junio, apenas supo que el jugador regresaba tras la sanción. Lo hizo para brindarle ánimo:
“Quería darte energías para atravesar la tormenta, botija. Porque mirá que todas las tormentas pasan. Todas.”
Así lo relataron los periodistas Andrés Danza y Ernesto Tulbovitz en su libro Una oveja negra al poder, donde recogieron múltiples anécdotas del expresidente.
Un acto que le pudo costar el Nobel de la Paz
Según sus asesores, ese exabrupto cerró cualquier posibilidad de que Mujica fuera nominado al Premio Nobel de la Paz en 2014, algo que se venía considerando seriamente. Su respuesta fue tajante:
“Nunca voy a dejar solo a un botija como Suárez”, respondió.
Una defensa con raíces sociales
Para Mujica, Suárez representaba más que un futbolista: era símbolo del esfuerzo de los más humildes. Lo calificó como un “gurí bárbaro”, que “se hizo de abajo”, recordando que el jugador llegó a trabajar como barrendero y caminaba kilómetros para visitar a su novia, Sofía Balbi, por no tener dinero para el transporte.
Luis Suárez, una figura polémica pero querida
Suárez, quien luego brillaría en el Barcelona junto a Messi y Neymar, también había sido protagonista en 2010, cuando una mano suya contra Ghana clasificó a Uruguay a semifinales del Mundial de Sudáfrica. Para Mujica, ese episodio no fue trampa, sino “viveza pura”.