Leverkusen cae con claridad ante un Bayern dominante y se aleja del liderato
El Bayer Leverkusen sufrió una dura derrota en su visita al Allianz Arena al caer 3-0 ante el Bayern Múnich, en un encuentro que reflejó las dificultades del conjunto visitante para imponer su estilo y sostener la intensidad de su rival. A pesar de algunos tramos de buen manejo del balón, las estadísticas finales dejaron en evidencia la falta de profundidad ofensiva y la escasa contundencia del equipo.
El cuadro visitante apenas logró 5 remates en todo el compromiso, de los cuales solo 1 fue al arco, un dato que resume su limitada capacidad para generar peligro real en el área rival. Aunque mantuvo una posesión del 47%, el manejo del balón no se tradujo en efectividad, ni en volumen de ataque. La ausencia de precisión en los últimos metros marcó la diferencia ante un rival que no perdonó.
En cuanto a la construcción del juego, Leverkusen completó 314 pases, con una precisión destacable del 92%, lo que demuestra que el equipo mantuvo orden en la circulación, pero careció de verticalidad. El exceso de toques en zonas seguras y la falta de profundidad ofensiva impidieron que el ritmo del juego se inclinara a su favor.
Defensivamente, el conjunto visitante se vio superado en varios tramos del encuentro. Concedió 19 remates del rival, 4 de ellos al arco, y permitió 10 tiros de esquina, una cifra que refleja la constante presión a la que fue sometido. Aunque intentó sostener líneas compactas, el bloque fue desbordado en momentos clave del primer tiempo, donde se definió el marcador.
En el plano disciplinario, el Leverkusen mantuvo control y limpieza en su juego, cometiendo apenas 4 faltas y recibiendo una sola tarjeta amarilla. No obstante, esa prudencia también evidenció cierta falta de agresividad en la recuperación del balón, lo que permitió al adversario dominar con comodidad el ritmo del partido.
El balance global deja claro que el Leverkusen tuvo serias dificultades para competir en intensidad y eficacia. La estadística más reveladora es la del bajo número de remates, una señal de que el equipo fue contenido con éxito y nunca logró imponer su habitual fluidez ofensiva.
Esta derrota representa un golpe en las aspiraciones del Leverkusen, que deberá reaccionar rápidamente si quiere mantenerse entre los protagonistas de la Bundesliga. La solidez estadística en la precisión de los pases contrasta con la falta de presencia en ataque, un aspecto que deberá corregir para volver a la senda del triunfo en las próximas jornadas.
