Los New York Knicks y los San Antonio Spurs disputarán la final de la Copa NBA
Los San Antonio Spurs dieron el golpe en Las Vegas y avanzaron a la final de la Copa NBA tras vencer 109-111 a los Oklahoma City Thunder. El equipo texano cortó una racha de 16 victorias consecutivas del campeón vigente y mostró carácter en un partido de alto nivel.
El regreso de Victor Wembanyama marcó el rumbo del juego. Tras 12 partidos fuera por problemas musculares, el francés impactó de inmediato. En solo 21 minutos anotó 22 puntos, tomó nueve rebotes y firmó el mejor balance del encuentro. Su presencia cambió el ritmo y el ánimo del equipo.
Trabajo colectivo y cierre sólido de San Antonio
La remontada no dependió solo de Wembanyama. Devin Vassell lideró la ofensiva con 23 puntos, mientras Stephon Castle y De’Aaron Fox aportaron 22 cada uno. Los Spurs ajustaron en defensa, firmaron un parcial clave antes del descanso y sostuvieron la ventaja en un último cuarto muy disputado.
Los esfuerzos de Shai Gilgeous-Alexander, autor de 29 puntos, no alcanzaron para Oklahoma City. San Antonio demostró que puede competir de igual a igual contra los gigantes de la liga.
Brunson guía a los Knicks rumbo a la final
Los New York Knicks sellaron su boleto a la final con una victoria contundente por 120-132 ante los Orlando Magic. Jalen Brunson brilló con 40 puntos y ocho asistencias, recibió cánticos de MVP y lideró con autoridad cada tramo del partido.

Orlando reaccionó en el tercer cuarto con Paolo Banchero y Jalen Suggs, pero Nueva York mantuvo el control. El equipo mostró madurez y evitó errores del pasado.
Nueva York sueña con cortar una sequía histórica
Los Knicks no ganan un título desde 1973 y ven en esta final una oportunidad única. Karl-Anthony Towns aportó 29 puntos y se consolidó como socio ofensivo de Brunson. OG Anunoby, Josh Hart y Mikal Bridges marcaron diferencias en defensa.
La final enfrentará a un equipo histórico que busca redención y a un proyecto joven que no le teme a nadie. La Copa NBA tendrá un cierre de alto voltaje.
