Llevaron de urgencia al hospital esta semana a un luchador norteamericano de la UFC, llamado Daniel Cormier, con una lesión ocular después de que perdiese la pelea por el título de la UFC 252 en el peso pesado contra Stipe Miocic en Los Ángeles.
Al final del tercer asalto Miocic extendió el brazo hacia la cara de Cormier y hundió los dedos en su ojo izquierdo, lo que no fue captado por el árbitro. Así que la pelea continuó.
Cuando Cormier, de 41 años, volvió a su esquina entre los asaltos, comentó a su equipo que no podía ver nada con el ojo izquierdo. Sin embargo, siguió luchando.
A pesar de la lesión, el veterano de artes marciales mixtas Cormier no se dejó tumbar y aguantó dos asaltos más, terminando el combate en pie y con posibilidades de salir ganador y llevarse el título de peso pesado de la UFC.
Sin embargo, por decisión unánime de los árbitros y tras una breve deliberación, triunfó Stipe Miocic, de 37 años.
Con información de Sputnik