¿Qué pasa con la federación de ciclismo en México?
Mientras Isaac del Toro conseguía 14 victorias esta temporada en Europa y se consolidaba como uno de los mejores pedalistas del mundo, en México las trabas administrativas tuvieron durante años en incertidumbre al ciclismo. Apenas hace unas semanas la federación internacional (UCI, Unión Ciclista Internacional) reconoció una nueva federación mexicana bajo el mando de Bernardo de la Garza.
La historia de carencias nacionales comenzó en 2009, cuando entró a presidir la Federación Mexicana de Ciclismo (FMC) Edgardo Hernández. El dirigente oaxaqueño se enquistó por 13 años hasta que fue desconocido por la UCI debido a “graves deficiencias de gobernanza”.El 7 de mayo de 2022 se llevó a cabo una asamblea de elecciones en la Ciudad de México, de la que resultó ganador Gerardo Langarica, de Jalisco. Poco duró el gusto porque la UCI, a petición del ex ciclista Raúl Alcalá, desconoció a ese comité directivo y entregó al Comité Olímpico Mexicano (COM) la clave para inscribir a los deportistas mexicanos en eventos internacionales.
La asamblea fue avalada en su momento por la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) que dirigía Ana Guevara, pero no tuvo la participación del Comité Olímpico Mexicano (COM), presidido por Marijose Alcalá.De acuerdo a la Ley General de Cultura Física y Deporte, las federaciones nacionales deben ser reconocidas por la federación internacional, el COM y la Conade para trabajar en orden. Por este conflicto, la federacion de ciclismo no pudo ser reconocida y el Comité Olímpico realizó las inscripciones para los eventos internacionales y los Juegos Olímpicos de Paris 2024, donde México consiguió llevar el equipo más grande de las últimas décadas en pista, ruta y montaña, pero administrativamente sin armonía.
